El obereño llegó a Oberá luego de su participación en el Mundial juvenil de Beach Handball en Tunez, y ni bien pisó suelo obereño charlamos con él en CUENTAS CLARAS.
El Prof. José Ángel Dalmau, entrenador de Tomás e impulsor del Beach Handball en la Capital Nacional del Inmigrante, estuvo presente en la gran recepción al joven obereño que se destacó en la competencia en las playas tunecinas. Destacó el desempeño del juvenil y anticipó que aún le queda un año en la categoría Sub17. «Junto con Tomás hay otros seis jugadores que son observados, pero él fue el que se destacó y logró ser convocado».
Por su parte, Tomás aseguró que fue una gran experiencia, tanto en lo personal como en lo deportivo. «Algunos resultados acompañaron y otros no, pero nos ganaron por apenas un gol, eso habla del nivel que tiene la selección», indicó. «Contento de haber participado de esta experiencia», aseguró el albiceleste.
Respecto de su participacíon en la Selección, reflexionó: «Al principio no me tenía tanta fe, pero tuve mucho acompañamiento de mi familia y del profe Angelito (Dalmau) y pude dar lo mejor».
«Todavía me queda un año más en la categoría (Sub17), pienso terminar el secundario y luego quiero mudarme a Buenos Aires para seguir con esto. Mi objetivo es llegar a Primera», adelantó Tomás.
Por otro lado, señaló que el haber sido convocado le sirve para potenciar la disciplina, que viene en alto crecimiento en Oberá. «La idea es motivar a las camadas más chicas y a cualquiera que quiera participar en el deporte. Nada es imposible, solo hay que animarse. Con esfuerzo todo objetivo se puede cumplir».
En el Mundial, el obereño se lució desde el debut ante Uruguay, donde marcó cuatro tantos. Frente a Senegal anotó diez, y fue clave en el clásico ante Brasil al convertir el gol decisivo del segundo set. Ya en la Main Round, Argentina venció a México 2-0 con otra gran actuación del misionero, que sumó ocho goles. Si bien en los cruces finales los resultados no acompañaron, el equipo cerró su participación con una victoria y una certeza, el futuro es prometedor.
